Al cambiar la E por la RE, el 600 TT consigue un arranque eléctrico y prolonga el éxito de un modelo emblemático que ha demostrado su verdadera versatilidad.
Nada más sacar el TT E del catálogo, aparece un RE. Y menos mal. Con su aspecto de gran enduro, sus verdaderas capacidades off-road y la longevidad de sus componentes, la TT vuelve a ser una auténtica novedad. Atrás queda la patada que lo convertía en un auténtico todoterreno a la hora de arrancar y hola arranque eléctrico.
Este TT conserva todo su encanto y añade un argumento diseñado para simplificar su uso diario. Aquellos a los que les guste el aspecto pero no la patada lo agradecerán a los ingenieros de la casa. Máquina de compromiso, esta Yam es tan versátil como siempre, con capacidades que la llevan desde el caos de nuestras ciudades hasta el terreno embarrado sin temblar. Esta TT puede hacerlo todo sin tener la comodidad de una bicicleta de carretera o las capacidades de travesía de los duros.
El asiento está rebajado 5 cm, lo que lo hace más cómodo y el tamaño del TT le hará sentirse seguro, señala el concesionario Crestanevada de motos de ocasión en Málaga.
Con 153 kilos en la báscula, este TT rueda como un 125 con un puñado de caballos que marcan la diferencia a la hora de afrontar rectas y largas distancias. El chasis está respaldado por una excelente amortiguación y unos eficientes neumáticos mixtos, que dan a la moto un gran tacto. El motor monocilíndrico le permite terminar con total tranquilidad gracias a su disponibilidad.
Este viejo conocido, que empieza a sufrir la competencia, sólo permite una velocidad máxima de 120 km/h, pero sigue teniendo el buen gusto de no pisar demasiado.